En España, por ejemplo, dicen que la palabra zueco viene de alcornoque, ya que el calzado se recubría con corcho. El Viajero reconoce en Asturias un calzado de madera que llaman madreña. La diferencia es que tiene un tacón bien marcado y dos tacos delanteros. Parece que esto da más estabilidad en los suelos irregulares y, según afirman, permite girar cuando se camina. Estas madreñas, o almadreñas, son tan bellas como incómodas; por eso actualmente se usan como adorno o floreros.

En ese mismo país, el campesinado de Cantabria usaba un calzado muy similar al zueco holandés. La albarca o abarca es un calzado rústico elaborado en cuero crudo que cubre sólo la planta de los pies y se asegura con cuerdas o correas sobre el empeine y el tobillo.